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Al inicio de la pandemia, muchos diagnosticaron una reducción de la inversión de extranjeros en viviendas del país. Pero, y para sorpresa de algunos expertos, esto se ha ido recuperando y España continúa siendo un foco de interés para los inversores. ¿Qué pasará con este negocio lo que queda de año y en 2022? Los expertos consultados ven un aumento de las inversiones de extranjeros que se acelerará con el incremento de la movilidad entre países.
Raf Jacobs, CEO De Inspire Property Experts, explica que realmente sí ha habido bajadas en inversiones extrajeras durante 2020, “pero no demasiado importantes”. A pesar de que no se ha podido viajar, se han cerrado ventas que ya se habían iniciado durante 2019, y se han cerrado en 2020 y 2021. “Los extranjeros compran especialmente vivienda de obra nueva y suelen ser procesos más largos de compra”. Estas se han realizado, sobre todo, en la Costa del Sol y Costa Blanca. El experto cree que las inversiones subirán notablemente entre septiembre y diciembre.
Anna Puigdevall, tesorera de FIABCI España y directora de la Asociación de Agentes Inmobiliarios de Cataluña (AIC), también ve este aumento de inversiones de parte de extranjeros, especialmente a medida que se abra el tema de movilidad y sea todo más fácil. “Esperamos la misma inversión que había antes que la pandemia, aproximadamente un 13% de los inmuebles que se compran en España lo harán extranjeros, durante la pandemia este porcentaje ha sido de un 11%”.
Comenta que, a excepción de la crisis de 2008, el sector inmobiliario siempre ha dado buena rentabilidad, “por lo que la inversión tanto extranjera como nacional en el inmobiliario en España seguirá”.
Por su parte, Montse Moreno, vicepresidenta de AEPSI (Asociación Española de Personal Shopper Inmobiliario), nos relata que actualmente los que compran a nivel de grandes volúmenes son fondos oportunistas que buscan oportunidades que ahora están mejor de precio y más adelante habrá el pequeño inversor que busca una segunda residencia o que pueda combinar alquilar su casa con pasar temporadas en España.
Francesc Pujol, director de Real Estate de Arum Group, tiene claro que existe de una demanda embolsada durante meses de pandemia producida por la imposibilidad de viajar de un país al otro. “Estamos constatando que esta demanda se está liberando a medida que la situación de la pandemia mejora y las restricciones para viajar disminuyen. Los compradores vienen con la intención de comprar, siendo un hecho muy significativo el que el período de decisión de compra se haya acortado significativamente”.
A ello Raf Jacobs añade que el inversor extranjero no va a abandonar su sueño de tener una vivienda en España, aunque haya habido una pandemia. “Es más, hay más ganas, porque muchos han vivido un confinamiento en países como el norte de Europa donde las condiciones son distintas y duras”.
También lo ve así Francesc Pujol por esa búsqueda de horas de sol que hace que España se convierta en un lugar de atracción. “Los inversores de países no mediterráneos valoran aún más este asunto como determinante. El poco disfrute que han podido hacer del sol durante los últimos 18 meses ha incrementado esta necesidad de buscarlo en nuestro país”.
Está claro que los precios de muchas viviendas han bajado. Esto se ve, desde fuera como una gran atracción. Jacobs destaca que hay verdaderos chollos, en contraste con otros países como Holanda o Bélgica donde allí los precios han subido y es imposible adquirir nada.
Además, “la gente no ha gastado dinero con la crisis de covid, ha ahorrado y es más fácil comprar y muchos pueden adquirir una vivienda mejor ubicada y más grande”. Así hay reducciones de precios en productos de inversión bien ubicados como Barcelona donde los precios han bajado por falta de turistas, “donde los inversores pueden sacar rendimientos muy altos”. Además, prosigue Jacobs, que los extranjeros residentes en España quieren mejorar y cambiar de alquiler a compra o vendiendo su casa para tener una mejor.
A su vez Jacobs también señala que las hipotecas son buenas para compradores con liquidez e ingresos recurrentes en España, “los bancos financian y tienen ganas de tener clientes”.
Trabajar a distancia es ahora una ventaja. Los extranjeros lo saben y prefieren hacerlo desde un lugar cálido o con vistas al mar. “Todos hemos teletrabajado en mayor o menor medida durante estos tiempos. En este sentido, la vivienda de segunda residencia se está adaptando claramente al teletrabajo, tanto por los espacios amplios de los nuevos diseños, como por las ventajas en la conectividad de línea telefónica de alta calidad”, responde Francesc Pujol.
Por su parte Jacobs comenta que el 90% de extranjeros no residentes busca teletrabajo y es un condicionante para elegir una zona u otra, “hace dos años no lo decían, ahora sí”. Es decir, no solamente buscan una vivienda, si no un lugar donde trabajar, “buscan un despacho en la casa y un espacio exterior”.
Aunque el futuro de todos los sectores y de la economía va a depender de la crisis sanitaria, para 2022, los expertos ven una mejor inversión extranjera que ahora. Y el comprador extranjero será eje clave: “jugará en todos los segmentos del mercado residencial, de alquiler, compra de segundas residencias y también inversiones para alquiler”.
Así, Anna Puigddevall pronostica que 2022 será igual o mejor que antes de la pandemia porque se habrá estabilizado la situación en general y el sector mantiene buena rentabilidad en el mundo y en España. Mientras que Montse Moreno cree que se incrementará el número de inversores que compren en España porque habrá menor incertidumbre con la pandemia y todavía oportunidades inmobiliarias interesantes.
Jacobs también lo cree, si bien apunta a que es posible que los precios de determinados lugares puedan subir.
Puigdevall además cree que, para comprar de forma segura en España, especialmente en cuanto a ‘build to rent’ se necesita seguridad jurídica, “necesitamos ya una nueva ley de vivienda y otros temas como el tope de alquiler como en Cataluña no facilitan la inversión del extranjero en inmobiliario”.
Anna Puigdevall apunta que británicos, franceses y alemanes para segunda residencia son los que suelen comprar casas en España, y de primera residencia cita marroquíes que las usan para vivir todo el año.
Si bien Montse Moreno señala que el inversor inglés se ha resentido un poco, tanto por el tema covid como por el Brexit y está ahora más a la expectativa en saber cómo se va a mover todo.
En el contexto actual, se espera que, a finales de 2021, más del 30% de los compradores de las viviendas de lujo de Madrid sean grandes carteras de inversión y ejecutivos internacionales. La capital se sitúa en cabeza como el destino prime español favorito para compradores estadounidenses, latinoamericanos y asiáticos, según Barnes Madrid.
La inversión o las segundas residencias son las principales preferencias de los empresarios internacionales. El 89% de los compradores del alto standing cree que va a pasar más tiempo durante el año en su segunda residencia, mientras que un 72% considera que va a alternar de manera equitativa entre su primera y su segunda vivienda.